Una Lágrima
Una lágrima brota de cada uno de mis ojos,
Secos por la tristeza eterna de la ausencia,
Puñal implacable que lastima los ocasos galopantes de mi paternal corazón,
Oh querido hijo, no hallo palabras que aplaquen mi dolor,
Dolor que como fantasma tempestuoso aviva mis pesares con quebrantos
lastimeros,
Abrazos y calor de prole, están ausentes en mis senderos grises,
Cuatro son mis amores, que en su andar lejano, incrementan mi pena,
por
cada tropiezo por cada extravío.
Una lágrima brota de cada uno de mis ojos,
Clamantes de perdón y abrazando una esperanza
Oh inmenso amor de padre; perdido en la banal inmadurez de años
juveniles,
Apaciguado por los años y las
hojas en blanco ya perdidas
Amado hijo, este amor mantiene altivo mi otoñal espíritu
Mi corazón calmado y sereno, solo ansia para tus senderos
Gran abundancia de amor, felicidad
y alegría,
Cada día, cada noche al pensar en mis cuatro copas...
Brota una lágrima de cada uno de mis ojos!
Jorge Luis Mujica F.